La Planta de Ávila sigue manteniendo la incertidumbre respecto a su futuro como planta constructora de vehículos, en su caso camiones. La planta por su posición geográfica comporta también graves problemas para la provincia, ya que no solo están en juego los cerca de 500 empleos directos de nuestros compañero/as de Nissan, sino también el tejido industrial del entorno, así como la vida económica de la ciudad.
Desde los Comités de Empresa de Nissan en España, quisiéramos mandar varios mensajes de reproche a la Compañía, por el incumplimiento sistemático de los acuerdos alcanzados con los trabajadores/as del centro. Esto pone muy en entredicho la validez de los compromisos de la multinacional, tanto con los trabajadores/as de Nissan Ávila como con las autoridades competentes, ya que el incumplimiento no sólo se queda en acuerdos, convenios y planes industriales, su compromiso fue más allá recibiendo ayudas públicas de la administración que no han servido para apuntalar el futuro de la planta abulense.
Uno de los compromisos se centraba en el lanzamiento en el año 2014 del flamante NT500, producto sobre el cual se aplicó una estrategia comercial experimental y claramente errónea trayendo más del 40% del producto de proveedores de China, incluso el motor también desde Japón (el anterior motor se fabricaba en BCN). Esta estrategia llevó a la desaparición de un producto que debiese de haber contribuido a mantener las producciones hasta 2023, para finalmente fabricarse sólo 7000 de las 100.000 unidades comprometidas.
La cancelación del NT500, junto con la paralización de las inversiones para adaptaciones a normativa en su otro producto el NT400, hace pensar que Ávila, si no cambia la situación, dejará de fabricar vehículos a mediados de 2019.
La última noticia es el nombramiento de un viejo conocido, Jose Vicente De Los Mozos como representante de la Alianza (Renault-Nissan) para el conflicto de Ávila. En su última visita a la Planta no ha aclarado nada el futuro de la misma, ya que entre las posibilidades que expuso se contempla el cierre, algo que nosotros no podemos consentir.
Desde todos los Centros de Nissan España queremos mandar un mensaje a la Dirección actual de Nissan en España, que es común para todos los Centros, diciéndoles que cuando incumple sus acuerdos con un Centro pierde la credibilidad con todos a la vez, y lo que está ocurriendo en Ávila puede provocar un replanteamiento en la forma de negociar en todos los centros de Nissan en España.
Queremos manifestar nuestro firme apoyo a los trabajadores y al Comité de Empresa de Nissan Ávila, y exigir a Nissan que cumpla el plan industrial de 2010 garantizando que la fábrica de Ávila mantenga como actividad principal la construcción de vehículos, sin pérdida alguna de los actuales puestos de trabajo. Así mismo exigir también a las autoridades competentes, como garantes y gestores de los acuerdos alcanzados, a mediar y velar por el cumplimiento de los compromisos adquiridos por Nissan con anterioridad.